El Ministerio de Salud adhiere como cada año el último viernes de agosto, a la conmemoración del “Día Nacional por una Argentina sin Chagas”. Esta jornada busca sensibilizar e informar sobre la importancia del diagnóstico, tratamiento oportuno y seguimiento de la transmisión materno infantil además de la vigilancia y el control vectorial de esta enfermedad.

Este año, bajo los lemas “multiplicar voces, ampliar derechos y pensemos en Chagas” durante todo septiembre se focalizará la atención en la detección oportuna de la mujer embarazada, el diagnóstico precoz de infección, en toda la edad de la mujer fértil y su tratamiento, el seguimiento y control de las y los recién nacidos de madres infectadas y el diagnóstico y tratamiento de todas y todos los niños de hasta 19 años. Además se busca visibilizar y dar difusión a la Ley Nacional de Chagas 26.281 y la desvinculación del tema con las situaciones de pobreza y zonas rurales.

Cabe señalar que la Provincia tiene estatus Libre de transmisión vectorial y transfusional, lo que implica que no hay vinchucas infectadas y no hay gente que se infecte por esta vía y por trasfusión de sangre.

Sin embargo, la transmisión congénita y los casos crónicos tienen lugar en nuestra zona, debido sobre todo a la inmigración desde países y provincias con transmisión vectorial vigente. Debido a esto las tareas de vigilancia y control vectorial son de suma importancia para mantener el status actual.

El Chagas es una enfermedad infecciosa causada por un parásito llamado Trypanosoma Cruzi que puede vivir en la sangre y en los tejidos de las personas o animales y en el tubo digestivo de unos insectos conocidos en Argentina como vinchucas o Chinche gaucha.

Este insecto se alimenta de sangre y convive con el hombre y sus animales domésticos para tener cerca su fuente de alimento. Se puede transmitir a través de la vinchuca, que generalmente pica y chupa la sangre de una persona o animal durante la noche. Luego, defeca sobre la piel depositando los parásitos y la persona o animal al rascarse se lastima y posibilita que los parásitos entren en la sangre. También de madre a hijo, la mujer embarazada que posee parásitos en la sangre y al estar infectada puede transmitirle la enfermedad a su hijo; o por transfusiones de sangre, cuando una persona infectada dona sangre a una persona sana.

El Chagas se detecta a través de un análisis de sangre gratuito en los hospitales y centros de salud de la provincia. Los síntomas son: fiebre prolongada, dolor de cabeza, diarrea, cansancio, irritabilidad, vómitos, falta de apetito, malestar general. En algunos casos puede no presentar síntomas. Si la picadura de la chinche se produce cerca del ojo y la persona se refriega, los parásitos entran por el ojo y se presenta un signo muy claro: el “ojo en compota”.

Los niños, adolescentes y jóvenes que reciben tratamiento pueden curarse. Los adultos también reciben tratamiento de acuerdo a la indicación del profesional de la salud. El tratamiento es gratuito y debe ser indicado por un profesional de la salud, que consiste en la toma diaria de una pastilla durante dos meses.

Principales medidas de prevención:

Mantener limpia la casa y lo que la rodea (corrales, depósitos, gallineros, etc). Mover y sacudir la ropa que no se usa. Ventilar las camas y los catres. Limpiar detrás de los cuadros y objetos colgados de las paredes. Mejorar la vivienda tapando grietas, huecos de las paredes, alisando techos y pintándola.

También construir los corrales y gallineros con alambre o palo a pique, si no es posible cambiar la enramada al menos una vez al año. Poner los gallineros y corrales lo más lejos posible de la vivienda. Los animales domésticos: perros, gatos, deben dormir fuera de la vivienda. Las palomas también transportan vinchucas, evitar que ellas estén cerca de la casa. En caso de recibir transfusión de sangre, asegúrese que la misma esté controlada.